Conocidos como "los cayos cubanos", las pequeñas islas de Jardines del Rey, enclavadas en la costa norte de Cuba y bañadas por las aguas del Canal Viejo de Bahamas, fueron inmortalizadas en la novela de Ernest Hemingway, Islas en el Golfo (Islands in the Stream). Los manglares y esteros, flamencos y espátulas rosadas, arenas blanqueadas al sol y aguas turquesas, hacen de este pequeño rincón un refugio perfecto.